Nerón Navarrete, análisis de la serie | Señal Memoria

nerón navarrete
Publicado el Jue, 29/02/2024 - 19:35
Cómo analizar una serie: N.N. Parte 1. Un rebuscador bogotano

En esta sucesión de seis artículos, que inicia con esta introducción, presentaremos un análisis interpretativo de la serie N.N., una comedia de situación a la colombiana que se emitió en la ya memorable televisión noventera. 



Este primer texto tiene la intención de acercarnos a una serie de herramientas de investigación social aplicadas a la televisión, concretamente a cómo esta serie representa o recrea la realidad socioeconómica.

N.N. o el objeto de análisis

No será este el espacio para contar la historia de la serie y su realización, a propósito instamos a la lectura de N.N., las aventuras de Nerón Navarrete y el artículo Hoy regresa Nerón Navarrete: el N.N. más famoso de la TV colombiana de El Tiempo.

Más bien, aquí nos basta con decir que la serie narra capítulo a capítulo las situaciones cómicas que vive Nerón Navarrete (N.N.), adulto pícaro (por usar un eufemismo), pobre y rebuscador, en el contexto bogotano de los noventa. Todo ello alrededor de su deseo de vivir la supuesta vida del hombre de clase media: una esposa atractiva y servicial, un empleo gratificante, una casa grande y cómoda, y demás condiciones de lo que sería el éxito en una sociedad capitalista. 

Parte de ello podemos identificarlo en la escena final del primer capítulo, que pueden ver en el siguiente fragmento. Igualmente, para seguir el análisis aquí presentado, invitamos a usar la plataforma RTVC Play, que es de público acceso. 

 

VR-BTCX60-065754 CLIP Duplat, Carlos (Director). (1990). N.N. Capítulo 1: El graduado. Colombiana de Televisión - Coltevisión. Archivo Señal Memoria, VR-BTCX60-065754 CLIP 1

 

Dicho esto, N.N. será nuestro objeto de análisis, y lo entenderemos como un producto cultural o, dentro de una terminología que iremos ampliando, como una forma simbólica, el objeto de estudio de la investigación cultural1. Ahora veamos, más allá de la popularidad que tuvo cuando se emitió, por qué elegir esta serie.  

Los noventa o el contexto socioeconómico

La serie hace referencia a la realidad bogotana y colombiana de los años noventa. La aparición de Amparo Grisales, como un símbolo sexual nacional, la Asamblea Constituyente y el problema del transporte público son una muestra de ello. Además de lugares, formas de vestir y de expresarse que, por más obvias que nos parezcan, dan cuenta de lo que la serie retrató como normalidad. 

Y en este contexto, hay una parte específica que queremos enfocar, se trata de la vida económica de los personajes y la manera en que esta se organiza, o en otras palabras, del campo económico y la estructura social que tiene2. En próximos artículos ampliaremos lo que se entiende por estos conceptos, pero basta decir que analizaremos lo que la serie dice sobre el contexto del protagonista como trabajador.

En el siguiente fragmento del Capítulo 16, podemos ver agrupados en una misma secuencia varios elementos que evidencian el peso que el contexto socioeconómico, y en específico el laboral, tienen en la trama:

 

Duplat, Carlos (Director). (1990). N.N. Capítulo 16: Vox populi, vox dei. Colombiana de Televisión - Coltevisión. Archivo Señal Memoria, VR-BTCX60-068316 CLIP 2

Representar un mundo posible

Una forma simbólica tiene varias características, ya hemos visto dos de ellas: es referencial respecto a un mundo real y se produce en un contexto (es contextual). Además, es convencional, por lo que usa un lenguaje que nos permite interpretarla, así como al hablar usamos palabras cuyo significado compartimos en mayor o menor medida;  es estructurada: lo que nos dice tiene una organización o estructura particular, así como las palabras en una oración; y, por último, es intencional, asumimos que quien la produce y difunde tiene una intención al hacerlo.

Las analogías con la comunicación verbal no son gratuitas, pues las formas simbólicas son ante todo objetos comunicativos, transmiten un mensaje de emisor a receptor. De allí que en adelante consideremos la serie como un texto, es decir, como un todo conformado por partes que en conexión entre sí le dan un significado reconstruido por quien  lee. 

La serie tiene tres dimensiones textuales desde la que podemos analizarla. Ya hemos mencionado que a rasgos generales se trata de la historia de un rebuscador en Bogotá, pero no es la historia real de este personaje sino un mundo posible, una ficción que nos muestra este relato, nos cuenta cómo sucede y nos quiere transmitir un mensaje: estas son respectivamente la dimensiones de la representación, la narración y la comunicación. Lo que haremos en los siguientes artículos será analizar qué nos ofrece la serie en estas tres dimensiones y cómo lo hace. 

¿Hacemos lo que nos dice la televisión? Voluntarismo versus determinismo

Pareciera sencillo llegar a la conclusión de que si consumimos cierto tipo de historias (representaciones narrativas de la realidad), actuaremos en consecuencia con esas formas en que nos es mostrado el mundo, parte de esta idea reside en lo que se ha llamado la cultura de la cancelación, donde se busca eliminar cierto tipo de representaciones de acuerdo a valores que se quieren defender.

Sin embargo, esta no es para nada una cuestión sencilla, se trata de un amplio y constante debate en las ciencias sociales donde —por ilustrar— las posturas más extremas plantean, por un lado, que actuamos por completa voluntad adaptándonos racional y conscientemente a cada situación, con independencia de los condiciones sociales que nos hacen ser quienes somos —incluídos los límites culturales implícitos en las formas simbólicas—, y,  por otro, que todo lo que hacemos está determinado por una cadena causal, o un destino, en el que las formas simbólicas son un reflejo de causas anteriores y asimismo nuestras acciones, entonces no somo libres de decidir. 

En esta serie de artículos iremos abordando esta cuestión, pues lo que fundamentalmente nos interesa explorar es cómo la manera en que N.N. representa nuestra realidad socioeconómica contribuye o no a que la entendamos y actuemos en ella de cierta forma. 

Adelantamos con decir que es evidente que no todas las personas interpretamos lo mismo de una serie o una película. En cada imagen, cada diálogo, escena o capítulo, hay elementos que significan cosas diferentes según a quien se le pregunte, solemos coincidir en gran medida, pues compartiremos un contexto cultural, pero los significados se diferencian por otros factores. Y no solo varía la interpretación, sino que la manera en que el mensaje que captamos conecta con nuestras ideas y nuestras acciones no es algo lineal. 

Por ejemplo, en la siguiente escena del Capítulo 3 vemos el comportamiento de diferentes cargos de una empresa, es de suponer que algunas personas que han visto la serie pueden tener estos cargos, pero  no necesariamente que van a emular las prácticas que muestra la serie. No obstante, es posible que la manera en que se aborda este contexto laboral nos dé herramientas para leer nuestras propias realidades y que tengan algún efecto en el curso de nuestras acciones, ya sea para reproducir las cosas tal cual son o para transformarlas.

 

Duplat, Carlos (Director). (1990). N.N. Capítulo 3: El tío rico. Colombiana de Televisión - Coltevisión. Archivo Señal Memoria, VR-BTCX60-065755 CLIP 1

 

Nota: Dado que no se retomará especialmente y solo por no dejarlo pasar, pues es un tema digno de investigación, hay que mencionar que para muchas personas que hoy vemos N.N., hay motivos temáticos y características de los personajes que han perdido su potencia cómica y hoy resultan ambiguos, pues los estereotipos machistas y las expectativas de la clase trabajadora de los años 90 ya no dan el mismo juego narrativo ni funcionan de la misma forma que entonces: situaciones que antes inspiraban carajacas o sonrisas empáticas, ahora pueden extrañar e incluso espantar, la crítica y la burla se confunden.

Nerón es un personaje ciertamente machista y misógino, que frecuentemente se ve movilizado por un deseo de poseer a una mujer en la lógica de propiedad ya mencionada y que tiene constantes prácticas de acoso que parecieran invitar a la identificación y la risa de un público que entonces veía todo ello con normalidad y entrañamiento. 

  1. El concepto de formas simbólicas es retomado de la obra de John B. Thompson (1998) Ideología y cultura moderna: Teoría crítica social en la era de la comunicación de masas.
  2. Estos conceptos los retoma Thompson del sociólogo Pierre Bourdieu y aquí los ampliamos a partir de obras suyas como Poder, derecho y clases sociales (2001) y La reproducción (1981).

 


Autor: Camilo Fernández J.

 

 

Fecha de publicación original Jue, 29/02/2024 - 19:35