Opio y amor en la música clásica | Señal Memoria

Carátula de disco de Héctor Berlioz
Publicado el Jue, 14/09/2017 - 16:35
Opio y amor en la música clásica

Un joven artista ama “INTENSAMENTE” (eso quiere decir mucho) a una muchacha que no le corresponde de la forma que él quisiera. Ella “le pone los cuernos” y una noche de desesperación amorosa, el artista recurre al consumo de una pequeña dosis de opio, que lo lleva a una serie de visiones y pesadillas en torno a su amada. En sus visiones pasa del placer al dolor. La asesina. Es capturado y ejecutado con guillotina. Su alma termina en un aquelarre, rodeado de brujas y demonios. Al final todo es un sueño producido por la “traba” generada por el opio.

Si esta es una historia que se lee algo macabra en la actualidad ¿cómo lo habría sido en el siglo XIX? cuando la gente era más “inocente”. Héctor Berlioz, un compositor francés del periodo romántico, logró llevarla a la música y el resultado fue su Sinfonía Fantástica.

Esta sinfonía se compone de cinco episodios en la vida de un artista. Aquí tenemos cómo suena ese trip de opio con música. Este es un ejemplo de una locura de amor y drogas.

“Sueños y pasiones”

A través de la obra, la muchacha aparece en varios pasajes de la sinfonía, representada por un tema musical específico, en el que se expresan los ardores del amor y su continua fuente de decepciones para el artista. Así suena ella:

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Ella – Pierre Monteux – 1948

Ahora bien, en esta parte de la Sinfonía Fantástica, el artista recuerda su vida antes de conocer a la mujer, con sus alegrías y desesperanzas. Pero llega ella y su vida cambia. Él forja sus esperanzas en ese amor. No obstante la muchacha no piensa de la misma forma. Ella no es lo que espera. Esto lo frustra y lo lleva a la desesperación. Hay que buscar soluciones: “Salir con otras personas”. “No pensar en eso”. “Abrace el opio del pueblo: la religión”.

“Un baile”

En el siguiente fragmento, el joven artista sale de “rumba”. Se va a un baile. Está feliz. Pero nuevamente lo asalta el recuerdo de la mujer que ama. Ya no es felíz. El recuerdo lo atormenta.

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Un baile – Pierre Monteux – 1948

Váyase de paseo: “Escena en el campo”

Ante la desesperación, el hombre se va de paseo al campo. Allí se encuentra con dos pastores cantando. Hay paz en el alma del muchacho. La ansiedad pasa... por un rato, porque vuelve el recuerdo de ella, que se va “colando” por entre la paz del campo. Vuelve la desesperación y se oyen a lo lejos unos truenos que anuncian la tormenta en la lejanía.

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Escena en el campo – Pierre Monteux – 1948

La mató: “Marcha al suplicio”

Aquí el joven artista inicia su” viaje” al dolor, acentuado por sus alucinaciones producto del opio. En medio de su desesperación, asesina a la mujer y es llevado a su ejecución. El método es el que mejor se conoció en Francia desde la revolución y que estuvo vigente hasta 1977: la guillotina. Aquí el momento del feminicidio, ella exhala su último aliento y pende la cuchilla sobre el cuello del artista. Finalmente es ejecutado y rueda su cabeza.

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Marcha al suplicio – Pierre Monteux – 1948

El viaje al infierno del opio: “Sueño de una noche de aquelarre”

El jóven artista se encuentra rodeado de brujas y demonios que celebran su funeral. Aquí está la música más alucinante de toda la obra. Campanas y metales nos traen una melodía que ha sido rememorada por Metallica y hasta Wendy Carlos. Lúgubre. Oscura.

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Dies irae – Pierre Monteux – 1948

Ante estas visiones y tormentos, producidos por el sueño del opio, vuelve a aparecer el recuerdo de la mujer asesinada. Esta vez es una visión grotesca y vulgar. Ella es una de las visiones que ahora se une a esta orgía diabólica que lo atormenta.

Berlioz – Sinfonía Fantástica – Sueño de una noche de aquelarre – Pierre Monteux – 1948

La historia real

Lo mejor de esta historia de amor y su consecuente “viaje de opio” es que fue real y el protagonista fue el mismo Héctor Berlioz. Algo de la inspiración también la obtuvo del libro Confesiones de un comedor de opio de Thomas de Quincey. También se inspiró en un par de episodios amorosos que vivió en su juventud. Por cierto, con una de ellas se casó y el matrimonio fue un verdadero desastre. “Ten cuidado con lo que deseas, porque se puede convertir en realidad”. La Sinfonía Fantástica se estrenó en 1830.

La grabación

Esta Sinfonía Fantástica se encuentra en el Archivo Señal Memoria en un disco de 78RPM de 1948 para el sello RCA Victor. La dirección orquestal está a cargo del director francés Pierre Monteux con la Orquesta Sinfónica de San Francisco. En su portada se encuentran detallados todos estos episodios por los que pasó aquel artista que tomó el camino de las drogas para deshacerse de su obsesión.

Fecha de publicación original Jue, 14/09/2017 - 16:35