Consuelo Luzardo, pionera de la televisión colombiana

Consuelo Luzardo: la actuación sin artificios

Ficha Técnica

Tema
Consuelo Luzardo
Fecha de producción
Autor
Elizabeth Vargas P.
Tipo de pieza
Video
Soporte
Betacam
Año de producción
1995
Duración
00 : 02 : 01
Publicado el Lun, 26/05/2025 - 08:10 HISTORIA DE LOS MEDIOS
Consuelo Luzardo: la actuación sin artificios

En la historia de la televisión colombiana hay nombres que no necesitan presentación. Consuelo Luzardo no solo ha sido testigo de esa historia: la ha encarnado. En más de seis décadas de trayectoria, su voz, su rostro y su forma de habitar la escena han acompañado el crecimiento de un medio, un oficio y un país. Su trabajo ha contribuido decisivamente a conformar el patrimonio audiovisual colombiano.

Nacida en Bogotá en 1945, comenzó su formación muy joven en la Escuela Nacional de Arte Dramático. En un contexto conservador, sus padres accedieron a inscribirla por una razón sencilla: era tan tímida que cualquier intento por sacarla de ese silencio parecía válido. Lo que nadie esperaba era que el escenario no solo le ofreciera una salida, sino un camino.

Su vínculo con la radio comenzó como oyente apasionada de los radioteatros dominicales de la Radiodifusora Nacional de Colombia, donde, bajo la dirección de maestros como Bernardo Romero Lozano, se interpretaban grandes obras de la literatura universal. Aquella experiencia fue formativa y decisiva. Más adelante, ya como actriz, participó en radionovelas y programas en Todelar y RCN, enfrentando el vértigo de actuar en directo con guiones recién escritos. Esa exigencia temprana en la precisión y el ritmo dejó una huella clara en su estilo: sobrio, afinado, atento al detalle.

En 1965 llegó a la televisión con Yo y tú, comedia costumbrista escrita por Alicia del Carpio. Durante más de veinte años, su personaje de Cuqui hizo parte de la cotidianidad de los hogares colombianos. Pero lejos de repetirse, Luzardo buscó siempre otros lenguajes. Fue parte del grupo de teatro experimental La Mano, un espacio con vocación pedagógica que acercaba a nuevos públicos a las artes escénicas. También participó en los orígenes de La Candelaria, cuando teatro, política y pensamiento crítico compartían mesa en los cafés del centro bogotano.

 

En televisión ha transitado todos los géneros: Caballo viejo, Los cuervos, La viuda de Blanco, El laberinto de Alicia, La nocturna. En el cine, ha actuado en películas como Préstame tu marido, Mamá, tómate la sopa o Mariposas verdes. Durante dos décadas trabajó también en publicidad, desde Propaganda Época, enfrentando el reto de la síntesis: decir mucho en muy poco tiempo.

Consuelo Luzardo sabe que el rigor, la preparación y el respeto por el oficio han sido la base de su carrera. Nunca ha actuado desde el exceso, sino desde la escucha. Cada uno de sus personajes está construido con una contención que no oculta la emoción, sino que la refina. No imposta. No exagera. 

Desde Señal Memoria, celebramos su cumpleaños reconociendo lo que su trabajo ha significado para la historia de la radio, la televisión y el teatro en Colombia. Porque hablar de Consuelo Luzardo es hablar de los medios públicos, de la memoria escénica del país, de la ética de una actriz que hizo del compromiso su forma de estar en el mundo.

Una intérprete que ha atravesado generaciones sin cambiar de convicción. Una vida sobre el escenario. Una actuación sin artificios.

Por: Laura Vera Jaramillo

Fecha de publicación original Lun, 26/05/2025 - 08:10