Albert Schweitzer (1875-1965), además de músico, fue filósofo, teólogo luterano, misionero médico en África, Premio Nobel de Paz e insigne tratadista de la obra de Bach, productor del libro homónimo “Johann Sebastian Bach” (1908), primer estudio importante no solo sobre la vida del compositor alemán, sino sobre su obra y la forma de ser interpretada. En sí mismo Schweitzer era un consumado organista que sentó el camino para la interpretación de la enorme obra escrita por Bach para el instrumento. Sus escasas grabaciones siguen siento pie de referencia.
Colección que agrupa los documentos relacionados con temas de interés general, expresiones artísticas, manifestaciones y producciones culturales originadas por los diferentes tipos de poblaciones en el país.
Cientos son las grabaciones del oratorio “Mesías” HWV 56, escrito por G.F.Händel en 1741. Ésta, a cargo de Sir Malcolm Sargent (1895-1967), es probablemente la más famosa realizada previamente a la era digital. Se dio con ella una aproximación a lo que puede ser considerado como entendimiento histórico de este repertorio: respeto por la instrumentación original planteada por Händel, fuerzas orquestales moderadas, coro relativamente pequeño, a diferencia de las magnas dimensiones con que se solía interpretar esta obra en la primera mitad del siglo XX. Sargent, particularmente famoso por la interpretación de oratorios, logró con esta grabación un clásico más en su lúcida carrera, que incluyó grabaciones del “Mesías” en los años 1946, 1954 1959 y 1964.
La polifacética figura de Nadia Boulanger (1887-1979), tuvo una agitada actividad en los años previos a la Segunda Guerra, como pedagoga y directora orquestal. Dentro de sus programas de concierto en la década de 1930, fue reiterada la presencia de Claudio Monteverdi (1567-1643), cuyos Madrigales grabó por primera vez en 1937 para el sello “His Master’s Voice” (HMV). Cerca de dos décadas más tarde, Boulanger retoma la obra del italiano para la grabación del disco que aquí se expone, publicado por DECCA en 1955. Contiene una variada selección del total de 9 libros de madrigales publicados por Monteverdi entre 1587 y 1638, ilustrativa al momento de abordar el cambio estético entre los períodos renacentista y barroco, así como el surgimiento de criterios para una interpretación musical con orientación historicista.
Este disco constituyó no solo un éxito comercial, sino el cambio del destino para una obra. Poco se recuerda la película sueca “Elvira Madigan”, del año 1967, cuya música incidental fue el segundo movimiento, Andante, del Concierto para piano No. 21 en Do mayor K.467, de Mozart. La grabación utilizada estuvo a cargo del pianista húngaro Géza Anda (1921-1976), reconocido por ser el primero en grabar el ciclo completo de Conciertos para piano de Mozart, bajo su propia dirección desde el teclado, proyecto adelantado entre 1961 y 1969. Con el éxito de la película, el susodicho concierto se dio a conocer con el epíteto de “Elvira Madigan” y la grabación fue publicada nuevamente con Pia Degermark en la portada, ganadora en el Festival de Cannes como mejor actriz por su papel protagónico en el film.
Walter/Wendy Carlos (1939), músico de credenciales impecables en su formación académica, se consagró a partir de los años 1960 a la interpretación del sintetizador análogo Moog, aparato pionero en una influyente línea instrumental para la música pop. Como manifiesto sobre las posibilidades del nuevo instrumento, Switched-on Bach (1968), primer ejemplar de varios dedicados al repertorio bachiano, es más que ilustrativo. La interpretación de Carlos es una verás encarnación del espíritu bachiano, aún en medio del insólito contexto. El cuantioso número de ventas del disco, se reflejó en las encumbradas posiciones que alcanzó en el Top de Billboard, así como en los Premios Grammy, donde obtuvo galardones en Mejor Álbum Clásico, Mejor Interpretación Clásica solista y Mejor Ingeniería de grabación clásica.
La influencia de Johan Sebastian Bach en la música de los Beatles, se vertió a través del suspicaz olfato de Sir George Martin (1926), calificado músico, productor y verdadero quinto Beatle. Su concepción musical dio sentido trascendental a buena parte de las canciones de la banda británica. Hay allí distintos homenajes y referencias, implícitas o explícitas, a la obra de Bach, afinidad elocuente también en las transcripciones realizadas de esas canciones a la estética barroca. Tanto Bach como los Beatles, han corrido la suerte de ser estilizados hasta la saciedad en productos como éste popular disco. Beatles, Bach, y de paso Bacharach, fueron así homogenizados apabullante, pero significativamente.
De mayor reconocimiento que Revueltas, en el panorama musical mexicano se encuentra a Carlos Antonio de Padua Chávez y Ramírez (1899-1978)compositor alineado con expresiones de corte nacionalista como las de Aaron Copland en EEUU, o Heitor Villa-Lobos en Brasil. Al igual que ellos, Chávez se encarga de dejar un rico legado de grabaciones en las cuales él mismo dirige sus obras. Probablemente es el primer compositor latinoamericano de renombre que continuamente tiene producción fonográfica. Es por eso que se tiene un número generoso de interpretaciones de repertorio latinoamericano bajo su batuta. Esta del año 1956, reúne piezas características del nacionalismo mexicano, interpretadas por la Orquesta Sinfónica de México, cuyo primer director en 1928 fue el propio Chávez.
En la relación asimétrica que caracterizó el ambiguo campo de la música clásica al despuntar el siglo XX, México y Brasil produjeron nombres significativos. Para el primer caso, Silvestre Revueltas (1899-1940) fue una figura idiosincrática, heterodoxa y vanguardista. Con el espíritu de la Revolución y la cultura popular mexicana, produjo un lenguaje tan revolucionario como el de cualquiera de sus contemporáneos europeos. En su momento, sin embargo, no fue muy reconocido. Su obra tuvo que esperar la luz que trajo en los años 1980 una generación de músicos en la que se incluye al Cuarteto Latinoamericano, agrupación sin parangón en el concierto de las naciones hispanoamericanas.