La obra de Pedro Morales Pino | Señal Memoria

Pedro Morales Pino
Publicado el Vie, 01/03/2013 - 10:40
La obra de Pedro Morales Pino

Para tal condición, contó con la fortuna y el infortunio de nacer en la segunda mitad del siglo XIX, más exactamente el 22 de febrero de 1863. Un homenaje a Pedro Morales Pino.

Es afortunado que en el momento de su llegada a Bogotá, en 1884, existiera una infraestructura musical, que si bien estaba lejos de lo que en materia de música se había logrado en capitales como La Habana o Buenos Aires, ofreció posibilidades de profesionalización musical, distribución de partituras y escenarios para concierto, lo que revirtió en un activo consumo de este campo artístico.

De Pedro Morales Pino se ha afirmado que fue el primero que llevó a la partitura géneros como el bambuco. El ejercicio musicológico ha demostrado que los primeros intentos de escribir bambucos en la notación del pentagrama, datan de las décadas centrales del siglo XIX, así como la escritura y publicación de pasillos. No obstante, los desarrollos estilísticos hechos por Morales Pino, fueron no solo de aprecio generalizado, sino que también se reprodujeron en las obras de compositores que de manera inmediata tomaron sus banderas y le dieron proyección a lo largo del siglo XX.

La congruencia entre el pensamiento musical del compositor y sus acciones, constituyeron la plataforma para emprender una ambiciosa aventura musical. Llegó a los Estados Unidos en una accidentada gira de conciertos, junto a su estudiantina, la conocida “Lira Colombiana”. Pasó por varios pueblos y ciudades de nuestro país hasta llegar a Buenaventura. De allí  partió a Panamá y siguió por Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Guatemala. En este último país el conjunto permaneció por más de un año, antes de alcanzar su objetivo final.

Es una historia que de manera apasionada recreó Gustavo Adolfo Rengifo en las notas que acompañan el trabajo discográfico Pedro Morales Pino – Cuatro caminos. La Radio Nacional de Colombia publicó este homenaje en 2006, aprovechando los 80 años de la muerte del músico. 

Fragmento:

Obra: Confidencias (pasillo) - Versión del Trío Itinerante basada en comentarios de Benigno "Mono" Nuñez y Manuel Salazar

Disco: Pedro Morales Pino - Cuatro Caminos (Radio Nacional de Colombia, 2006)

Intérpretes: Trio Itinerante (Fabián Forero, bandola; Gustavo Adolfo Rengifo, tiple; Raúl Walteros, guitarra)

Ellie Anne Duque, en una obra sobre Morales Pino editada por el Banco de la República, dice que “los integrantes de la Lira Colombiana se anticiparon, por un decenio, a la fuente de empleo generada por el boom de las grabaciones de toda suerte de música popular en Nueva York, pero no encontraron el trabajo, ni el éxito anhelados”. Por esa razón, luego de una temporada inestable en Guatemala, Morales Pino regresó a Colombia en 1918, donde continuó con su labor como compositor, bandolista y director de estudiantinas.

Tras otros viajes y giras de concierto en Colombia y Suramérica, Morales Pino falleció en Bogotá. En la década de 1920 se vivió en Colombia una agitada discusión en torno a su definición como nación y a los aportes que en tal sentido pudieran significar sus expresiones culturales y artísticas. 

Al respecto, Duque afirma: “La generación centenarista de músicos (Emilio Murillo, Ricardo Acevedo Bernal, Fulgencio García, Luis A. Calvo, Carlos Escamilla, Alejandro Wills, entre otros) enfrascada en un discurso nacionalista que llegó a tener ribetes de cruzada entre 1920 y 1940, encontró en el trabajo de Morales Pino el ejemplo paradigmático de sus empeños. En Morales Pino vio el origen y el camino de la música nacional”.

La investigadora concluye: “Morales Pino tomó algunas de las tradiciones musicales andinas, creó obra original a partir de ellas, las vertió en inteligentes arreglos para conjuntos de cuerdas y las ejecutó en versiones impecables, hombro a hombro con el repertorio de conciertos del momento. En manos de Morales Pino el estatus de música de salón del pasillo, la danza y hasta el bambuco adquirió incuestionable legitimación”.


Autor: Jose Perilla
Fecha de publicación original Vie, 01/03/2013 - 10:40