Publicado el Jue, 04/04/2013 - 11:32
Nos remangamos con un programa sobre las minas antipersonales
Escuche en este programa, realizado para el proyecto "Radios Ciudadanas espacios para la Democracia" del Ministerio de Cultura, las voces de quienes han sido víctimas de estas minas: quiénes son, cuáles son sus derechos, y cuáles son las dificultades para que estos derechos puedan garantizarse. A pesar de que el marco jurídico garantiza una atención integral a las víctimas de estas minas, en la práctica aún existen muchas dificultades para lograr acceder a los beneficios que, en materia de salud y bienestar social, otorga la ley a estas personas. Dificultades que van desde la imposibilidad de trasladarse a los centros de atención y dificultad para cumplir con los requisitos y plazos administrativos, hasta el desconocimiento de los mínimos derechos y de cómo hacerlos valer.
Minas Quiebra Almas
Este tipo de armas se han utilizado desde la primera mitad del siglo XX, a estas minas se les conoce también con el nombre de minas antipersonales, artefactos explosivos utilizados en países como Colombia, donde se presentan enfrentamientos armados. Son en su mayoría, fabricaciones caseras que se entierran o se instalan de manera encubierta y explotan de manera sorpresiva cuando se les ejerce una leve presión.
Una de las características que hace que estas armas sean especialmente peligrosas es que, una vez enterradas o escondidas, pueden durar activas hasta 40 y 50 años después. Las minas antipersona pueden fabricarse de manera industrial, pero abundan las artesanales por sus bajos costos de fabricación. En contraste, el dispositivo que se requiere para detectarlas y desactivarlas es bastante costoso.
Durante los últimos 60 años, millones de personas de todo el mundo han resultado víctimas de las minas al tropezar por casualidad con ellas en los campos y zonas rurales, terrenos que, al ser considerados en algún momento campo de batalla, fueron minados y que luego no se limpiaron por completo. La peligrosidad de las minas aumenta mucho más en el caso de las guerras irregulares, aquellas donde no todos los grupos enfrentados han aceptado acatar las reglamentaciones internacionales. Sin que la situación pueda controlarse mayormente, cualquier lugar puede convertirse en un campo de batalla y cualquier civil puede verse envuelto en el conflicto.
En 1997 la comunidad internacional aprobó en Noruega la Convención sobre la prohibición del empleo, almacenamiento, producción, y transferencia de minas antipersona, y sobre su destrucción, la cual fue ratificada por los 121 Estados firmantes del texto final en Ottawa. Sin embargo, somos uno de los pocos países en el mundo donde todavía se siguen sembrando estos artefactos explosivos.
Algunas cifras en Colombia:
- - Según el Programa Presidencial para la Acción Integral contra Minas, entre 1990 y febrero de 2013, se registraron un total de 10.253 víctimas de minas antipersonales. De éstas, el 40% son civiles y el 62% miembros de la Fuerza Pública. Del total de víctimas, 1.003 eran menores de edad.
- - La Campaña Colombiana Contra Minas (CCM) trabaja desde dese 2007 acompañando y asesorando a las víctimas, y publica los datos del informe Monitor de minas terrestres. Según el último, publicado en 2011, Colombia está entre los países más minados del mundo, después de Camboya, Angola, Bosnia-Herzegovina y Afganistán.
- - Según Naciones Unidas, en promedio se presentan 2 víctimas diarias a causa de las minas antipersona, así como una tendencia al incremento de víctimas. El 80% de los eventos se presentan en el área rural y 30 de los 32 departamentos de Colombia están afectados por las minas antipersonal.
- - Antioquia, Caquetá, Norte de Santander, Bolívar, Meta y Cundinamarca son los departamentos que presentan mayor número de víctimas por Mina Antipersona.
Fecha de publicación original Jue, 04/04/2013 - 11:32
