Mitología griega y madres que aniquilan en la radio

La maternidad generalmente se representa desde el vínculo de mujer protectora, su servicio a la familia y no se ve lo demás, que es el ser mujer, la relación mujer-hijo/a, mujer-esposo, la posible liberación de lo tradicional considerado anómalo en la figura de la madre. En este artículo, a través del Archivo Señal Memoria reunimos ejemplos de madres que no protegen a sus hijos, sino que, en algunos casos, los aniquilan.

La procreación es un tema que ha sido explorado por muchos dramaturgos a lo largo del tiempo, el radioteatro, género radial que dominó la parrilla de programación durante 1940 y 1980, no es ajeno en absoluto a representar el rol materno, el cual va desde la mujer cuidadora y entregada a su familia hasta aquella que atenta contra su naturaleza y va en contra del rol asignado socialmente.  

Al hablar de teatro y específicamente de radioteatro en Colombia, es inevitable no destacar la influencia de la mitología griega, obras que se pusieron a disposición de los radioescuchas gracias a las versiones radiofónicas a cargo de Bernardo Romero Lozano y Gonzalo Vera Quintana por medio del Radioteatro Dominical de la entonces Radiodifusora Nacional de Colombia. 

Este género teatral ha proporcionado el rol tanto de la mujer como diosa madre de la naturaleza y todo aquello que nos rodea, como es el caso de Deméter, hasta la madre asesina por antonomasia, Medea, cuya magnitud ha inspirado incontables obras de arte, música y literatura a lo largo de los siglos, y su legado sigue influyendo en la cultura moderna.

Deméter y Perséfone 

Deméter era la antigua diosa griega de la agricultura, conocida también como la diosa madre, diosa de la cosecha, la fertilidad y el ciclo de la vida y la muerte, es una de las figuras femeninas más poderosas de la mitología. Deméter, era hija de los titanes Cronos y Rea, también era la madre de Perséfone, a quien Hades, el rey de las tinieblas, decide raptar y llevar al inframundo para que gobierne junto a él desde las  sombras. 

Deméter, al enterarse de que su hija ha sido raptada, deambula por el mundo buscándole, hasta que descubre que ella está con Hades, con el consentimiento de Zeus. Por ello, lo sentencia asegurando que dejará que los humanos mueran de hambre, y negándose a fertilizar la tierra. 

Finalmente, Hades permitió a Perséfone pasar unos meses del año con su madre y parte del año en el inframundo. Este ciclo de muerte y renacimiento pasó a conocerse como las estaciones, puesto que el dolor de Deméter al no ver a su hija hacía que la tierra se volviera estéril durante los meses de invierno y floreciera con vida durante la primavera y el verano.

Tradicionalmente, la diosa madre era invocada por mujeres que buscaban fertilidad o protección para sus hijos, se le consideraba protectora de las jóvenes y las novias, como un símbolo de amor y devoción maternal, ya que Deméter estaba dispuesta a acabar con la humanidad con tal de salvar a su hija del inframundo.