Publicado el Mar, 06/06/2023 - 18:56

El humor colombiano: ¿por qué nos reímos tanto?

Archivo Señal Memoria de RTVC. Diseño gráfico: Karen López para Señal Memoria de RTVC

En este artículo abordamos las características principales del humor colombiano. A partir de distintas fuentes, enumeramos las opiniones de expertos sobre la importancia del humor en el país: principalmente, que hace más llevadera la densa realidad y sirve como desfogue. Tras ese marco teórico, citamos tres ejemplos de humor a través de material del Archivo Señal Memoria: Dago García explica el humor de clase media que es la base de sus películas, Pepe Sánchez presenta el piloto de Romeo y Buseta y, finalmente, con Zoociedad vemos a los políticos en plastilina.


En 1996, el escritor colombiano Mario Jursich, que entonces trabajaba en la editorial Tercer Mundo, le propuso a su jefe hacer una antología de chistes sobre el expresidente Julio César Turbay. Así lo recuerda en su ensayo “El poder de la gramática”, que hace parte del libro Crecer a golpes, editado por Diego Fonseca. Jursich luego sobre el paso de presidentes letrados e intelectuales como Rafael Núñez a gobernantes como Turbay, que provocaba chistes por su supuesta falta de inteligencia. El libro no llegó a ser publicado, pero es elocuente que en la época del Estatuto de Seguridad y múltiples violaciones a los derechos humanos, una gran respuesta generalizada de la población fuera burlarse de su máximo mandatario. Jursich cita muchos chistes, leamos uno: “Va Turbay en la limusina de la presidencia y de pronto el chofer le dice que tienen un pequeño problema. ‘Presidente, ¿por favor se puede bajar a ver si las luces estacionarias están bien?’ Y él se baja y responde: ‘Sí. No. Sí. No. Sí. No’”.

Daniel Samper Ospina dice que para los colombianos el humor es una manera de resistir: la realidad política es tan espesa que el humor la hace soportable. Carlos Mario Aguirre, fundador del grupo de teatro El Águila Descalza, explica que en el oficio del humor no se deben crear personajes para que sean cómicos, pues eso deviene fácilmente en estereotipos, sino concentrarse en situaciones que generen la comedia. Mauricio Navas sostiene que el humor es importante para los colombianos porque abre una salida a las tensiones: lo que hace reír es la angustia; Antonio Sanint está de acuerdo y habla de cómo los comediantes dan alivio: a la audiencia le quita un peso de encima saber que sus penas no son únicas. 

Sigamos. Suso ‘el Paspi’ añade que el humor que le interesa es el que explora la condición humana. Por otro lado, el cineasta Dago García plantea que en el humor colombiano —ese que se alimenta de la exageración barroca, de lo caraicaturesco— le gusta trabajar con personajes extremos, cuya extremismo es la causa de su carácter de comedia; se puede entender, incluso, el humor como la fórmula de tragedia + tiempo, por eso uno ríe de lo que antes lloró. Y García propone un elemento adicional: el humor convive con el olvido como herramienta con la que los colombianos alcanzamos la felicidad.

Estos análisis —que hacen parte del primer capítulo de la serie documental de RTVC República de Comedia, presentada por Andrés López— nos empiezan a acercar a la pregunta de qué define al humor colombiano. La pregunta tiene un gran peso: en ese episodio, Eduardo Arias plantea que el humor funciona como un documento importante incluso para los historiadores; esos chistes sobre Turbay de los que hablaba Jursich nos cuentan lo que queda en los márgenes de los relatos oficiales o más serios, pero son vitales para sentir el pulso de la sociedad colombiana de hace cincuenta años, por ejemplo. O sea que hay pocos temas más serios que el humor, que el crítico y profesor Ómar Rincón describe como un acto de inteligencia, un encuentro con el otro; por eso Rincón critica el chiste fácil y tonto, muchas veces discriminador, y aboga por el humor que nos permite pensarnos: el que hacen los que ya mencionamos, y también Eduardo Arias y Karl Troller, Martín de Francisco y Santiago Moure, o Jaime Garzón.

Continuemos con nuestra exploración del humor colombiano y sus características a través de tres ejemplos del Archivo Señal Memoria. 

Empecemos con Dago García, que ha provisto de risas a los colombianos por décadas a través de las películas que ha dirigido, escrito y producido: La pena máxima (2001), Te busco (2002), El carro (2003), La esquina (2004), Muertos de susto (2007), Ni te cases ni te embarques (2008) y la saga de El paseo. En 2016, García habló con Deysa Rayo de El Atardecer sobre el humor en el cine colombiano, ese género que más atrae a los espectadores del país a las salas y teatros. “La risa nos reconforta con la vida”, explica García como respuesta. Luego profundiza en cómo la clase media, esa en la que se concentran sus obras, vive la nacionalidad con intensidad, por eso las comedias que la retratan permiten analizar al país. Escúchenlo ustedes mismos.

Fecha de publicación original Mar, 06/06/2023 - 18:56